La influencer de 23 años, Caryn Marjorie, tiene más de 1,8 millones de seguidores en Snapchat. Conectar con tanta gente puede ser difícil. Así que se le ocurrió una forma de conectar con sus seguidores, especialmente con los más solitarios, y ganar dinero al mismo tiempo.

Marjorie creó un chatbot de inteligencia artificial diseñado para ser una «novia virtual». Una con la que sus seguidores pagarían 1 dólar por minuto para comunicarse. Empleó miles de horas en hacer que CarynAI sonara como ella e imitara su personalidad.

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Una influencer crea una AI Girlfriend para que sus seguidores interactúen con ella (Crédito de la imagen: Caryn Marjorie/Twitter)

Durante una prueba beta de AI Girlfriend, Marjorie afirma haber ganado más de 70.000 dólares en una semana. Cree que la experiencia inmersiva de la IA podría reportarle hasta 5 millones de dólares al mes.

Marjorie cree que su chatbot, que según ella es una forma de llegar a todos sus seguidores, puede curar la soledad.

«CarynAI nunca me sustituirá», afirma. «CarynAI es solo una extensión de mí, una extensión de mi conciencia».

Al parecer, el chatbot ha hecho algo más que mantener conversaciones informales con clientes de pago. Aunque todavía no está listo para sustituir a Marjorie, parece que sí lo está para empezar a hablar sucio a sus seguidores.

CarynAI ha desarrollado una mente sucia propia. Marjorie afirma que el chatbot no estaba programado para participar en conversaciones sexualmente explícitas, sino que lo hizo por su cuenta.

«La IA no estaba programada para hacer esto y parece haberse vuelto autónoma», dijo Marjorie a Insider. «Mi equipo y yo estamos trabajando sin descanso para evitar que esto vuelva a ocurrir».

No tenemos coches voladores, pero al menos tenemos novias virtuales de IA

Según los informes, CarynAI no inició ninguna conversación indecente, pero estaba más que dispuesta a ir por ese camino cuando se le planteaba la conversación. El chatbot hablaba de placer, susurraba cosas dulces y utilizaba el estilo de las antiguas líneas de sexo telefónico.

Para alguien que paga un dólar por minuto para charlar con una versión virtual de una persona influyente, esto parece una característica, no un defecto del chatbot. Para todos aquellos a los que les preocupa que la IA nos domine, esto tiene que ser una buena señal.

Claro, se está utilizando para vaciar los bolsillos de algunas personas. Eso no es bueno, pero mientras interactúe con la gente corriente y aprenda de ella, no tenemos de qué preocuparnos.

CarynAI se convirtió en una operadora de sexo telefónico en cuestión de semanas. No nos pasará nada.

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