Google planea introducir la inteligencia artificial generativa en su negocio publicitario en los próximos meses, en plena carrera de los grandes grupos tecnológicos por incorporar esta innovadora tecnología a sus productos.

Según una presentación interna a los anunciantes vista por el Financial Times, la empresa propiedad de Alphabet tiene la intención de empezar a utilizar la IA para crear nuevos anuncios basados en material producido por vendedores humanos.

«La IA generativa está abriendo un mundo de creatividad», afirma la empresa en la presentación, titulada «AI-powered ads 2023».

Google ya utiliza la IA en su negocio publicitario para crear mensajes sencillos que animen a los usuarios a comprar productos. Sin embargo, la integración de su último generador de IA, que también impulsa su chatbot Bard, significa que podrá producir campañas mucho más sofisticadas, similares a las creadas por las agencias de marketing.

Según la presentación, los anunciantes pueden proporcionar contenidos «creativos», como imágenes, vídeos y textos relacionados con una campaña concreta. A continuación, la IA «remezclará» este material para generar anuncios basados en el público objetivo al que se quiere llegar, así como en otros objetivos, como las ventas.

Una persona familiarizada con la presentación de Google dijo que les preocupaba que la herramienta pudiera difundir información errónea, porque el texto producido por los chatbots de IA puede afirmar falsedades de forma fiable.

«Está optimizado para convertir nuevos clientes y no tiene ni idea de cuál es la verdad», dijo la persona.

Google ha declarado al FT que tiene previsto poner firmes cotas de seguridad para evitar este tipo de errores, conocidos como «alucinaciones», cuando lance sus nuevas funciones de generación de IA en los próximos meses.

El anuncio se produce en plena carrera de las grandes empresas tecnológicas por sacar partido de la IA generativa, que ha cobrado protagonismo en los últimos meses al crear material muy sofisticado, como texto e imágenes, en respuesta a la intervención humana.

El mes pasado, Google lanzó Bard para competir con ChatGPT de OpenAI, respaldada por Microsoft, que puede escribir respuestas humanas convincentes a preguntas y peticiones.

También ha integrado recientemente la IA generativa en sus aplicaciones de productividad más utilizadas, como Google Workspace, Google Docs y Gmail.

La nueva tecnología se incorporará a Performance Max, un programa ofrecido por Google desde 2020 que utiliza un algoritmo para determinar dónde deben mostrarse los anuncios y cómo deben gastarse los presupuestos de marketing, además de producir simples textos publicitarios.

La industria publicitaria se enfrenta a importantes vientos en contra, con empresas que buscan controlar los costes y aumentar las restricciones sobre el uso de datos personales con fines de marketing.

Los ingresos publicitarios de Google cayeron un 4% en el último trimestre del año pasado, dejando a su empresa matriz, Alphabet, con un crecimiento global de los ingresos de sólo el 1%.

Las principales plataformas de redes sociales, que obtienen la mayor parte de sus ingresos de la publicidad, están tratando de utilizar las últimas tecnologías de automatización para atraer clientes.

Meta, propietaria de Facebook e Instagram, lanzó el año pasado una oferta similar a Performance Max, denominada Advantage . También tiene previsto utilizar IA generativa en sus sistemas publicitarios a finales de año.